El arquitecto uruguayo Rafael Viñoly es centro de debates que giran alrededor de sus propuestas para el desarrollo inmobiliario del empresario hotelero Giuseppe Cipriani y la recuperación del antiguo Hotel San Rafael en Punta del Este.
Ríos de tinta han corrido acerca de sus propuestas y las negociaciones frente a la Junta Departamental de Maldonado, y no es el espíritu de esta nota ahondar en eso.
Elegimos acá revisar en la trayectoria del arquitecto, las formas de recuperación de edificios que su firma elige para valorizarlos frente a ampliaciones o intervenciones necesarias para las cuales ha sido convocado. Ejemplos de arquitectura que debe remitirse a una preexistencia o contexto histórico referente e interactuar con ellas en un resultado que acompaña funciones contemporáneas necesarias y una estética que usualmente opta por el contraste para diferenciar estilos y protagonismos.
El Museo de Arte de Cleveland
El Museo de Arte de Cleveland, una de las más grandes e importantes instituciones de arte de los Estados Unidos, fue construido en 1916 por los arquitectos locales Hubbell y Benes como pabellón de estilo neogriego o greek revival. Está situado en un bucólico parque con una laguna diseñado por Olmsted Brothers. Sin embargo, las subsiguientes adiciones, como la notable ala educativa diseñada por Marcel Breuer, desdibujaron el plan racional de la estructura original, lo cual dio como resultado un laberinto de espacios desarticulados y confusos. Rafael Viñoly resolvió este problema con un diseño de ampliación y renovación y creó así una organización coherente de las salas de exposición que añade el espacio proyectado y unifica los diferentes vocabularios arquitectónicos en una singular obra.
Con este plan, se retoma el concepto original del edificio de 1916, considerándolo como una «joya» enclavada dentro del anillo continuo que forma el área de la ampliación donde se incluye el renovado edificio Breuer. Las otras adiciones se demolieron para hacer sitio a una gran plaza interior con iluminación natural y una cubierta de vidrio y acero ligeramente curvada, alrededor de la cual se organiza nuevamente todo el museo. El paisajismo interior y la iluminación natural atraen a los visitantes al centro del diseño. La plaza sin columnas es un amplio y acogedor punto de encuentro para los visitantes del museo y un espacio para eventos multitudinarios. Está flanqueado por una cafetería, un restaurante y una gran tienda que brindan sus servicios a los visitantes.
Las nuevas alas del museo al este y al oeste encierran la plaza estrechándose hacia el edificio de 1916, donde culminan en galerías acristaladas completamente transparentes y puentes peatonales que permiten vistas abiertas a los laterales del pabellón histórico. El revestimiento exterior de piedra de las nuevas alas del museo alterna franjas de granito y de mármol que modulan las dos estéticas muy diferentes del edificio de 1916 y del de Breuer. De esta manera, se conservan las diferencias entre lo «moderno» y lo «histórico», pero se integran en un todo coherente.
El proceso de construcción en dos fases se ajustó al programa de recaudación de fondos del museo, permitiendo que continuara su actividad (a escala reducida) mientras el proyecto estaba en construcción. La fase 1, completada en 2009, consistió en la renovación de los edificios de 1916 y de Breuer y la construcción de la nueva ala este. La fase 2 comenzó con la demolición de las adiciones restantes del museo para hacer sitio al ala oeste y al atrio central, que se finalizaron en 2012.
1401 Spruce Street
La fachada de estilo neoclásico los vestíbulos de la década de 1920 de este edificio de oficinas que en sus días fue magnífico se conservan cuidadosamente en su transformación en departamentos residenciales amplios y lujosos en el revitalizado distrito cultural de Filadelfia.
Post Brothers Apartments, uno de los promotores de viviendas más innovadores de Filadelfia, encargó a Viñoly el diseño, adaptación y rehabilitación de 1401 Spruce Street, una icónica torre ubicada en la calle Avenue of the Arts del centro de lal ciudad, frente al Kimmel Center for the Performing Arts, también diseñado por Viñoly en el año 2001. La torre de 21 pisos diseñada por Joseph Kuntz se construyó en 1922 como sede de la empresa Atlantic Richfield Oil Company. El edificio, revestido en terracota con elaborados detalles clásicos, tiene un diseño de estilo revival clásico dispuesto en tres sectores: una base de cuatro pisos, un cuerpo principal de 13 pisos y un coronamiento de 3 pisos con uan elaborada cornisa. el piso 21 es un ático con perímetro menoso al del resto del edificio.
Se quitaron cinco de los nueve elevadores originales y se aprovechó ese espacio para los interiores de los departamentos. Los planos de planta resultantes son altamente eficaces (área bruta/área neta =1,13) lo cual maximiza el capital invertido.
En la parte residencial hay un nuevo vestíbulo y acceso que enfatizan la transformación residencial del conjunto.
Para mantener la naturaleza lujosa, el edificio cuenta con un estacionamiento privado en dos pisos subterráneos que utiliza una innovadora tecnología robótica para estacionamiento y un elevador de automóviles con acceso directo desde el vestíbulo de la zona residencial.
La transformación conserva respetuosamente la fachada existente y ofrece lujosos acabados interiores y el diseño espacioso de los apartamentos. El diseño combina armoniosamente con los edificios históricos y contemporáneos de este barrio céntrico de Filadelfia.
Plan Maestro de la Estación Eléctrica Battersea
Después de tres décadas de propuestas de planes de remodelación fallidas, la icónica central eléctrica vuelve a cobrar vida como núcleo de un vasto proyecto de rehabilitación urbana sostenible y de uso mixto en la ribera sur del río Támesis en Londres.
Battersea Power Station es una antigua central termoeléctrica a orillas del Támesis incluida en la lista del patrimonio nacional como edificio protegido de grado II*. El plan director para la remodelación de la central de Battersea apuesta por un proyecto sostenible de uso mixto con espacios residenciales, comerciales, culturales y para eventos entremezclados con instalaciones públicas y una planta de cogeneración con cero emisiones de carbono que reutilizará y adaptará la propia central. El histórico edificio de la central eléctrica funciona como punto focal del plan de regeneración de la zona que lo rodea, donde se propone crear una nueva comunidad autosuficiente y dinámica que funcione como anclaje para el plan de promoción de desarrollo Vauxhall/Nine Elms/Battersea Opportunity Area.
El objetivo principal del diseño es reforzar la presencia de la central eléctrica como la característica arquitectónica principal del complejo al enmarcarla en un espacio formal («el Círculo») definido por un lago artificial que refleja la luz y vistas abiertas hacia y desde el río Támesis y su ribera norte. Se potencia aún más la accesibilidad a la zona con la creación de tres calles principales que unen la central eléctrica con el perímetro sur del emplazamiento y a través de una futura ampliación del parque y el paseo que bordean el río.
El vocabulario arquitectónico del complejo está definido por una serie de variadas tipologías que reflejan las diferentes áreas con carácter propio del espacio público. El entorno de la central queda definido por las fachadas curvas de los edificios que encontramos al acercarnos a ella, que adquieren dinamismo gracias a la variada alineacin de los pisos para crear terrazas profundas y abiertas en las viviendas, una referencia a la tradición de casas adosadas en hilera de Londres. Esta reinterpretación del tipo de edificios adosados en hilera dinamiza el plano de la fachada y guía el tránsito de los residentes y visitantes a medida que avanzan hacia la ribera.
La edificación de Battersea evolucionará según las actuales directivas de la ciudad para promover la sostenibilidad. La distribución de los edificios se ajustó reiteradas veces en función de los estudios de soleamiento para garantizar que todos los espacios disfruten de luz natural y vistas, y simultáneamente los cerramientos de los nuevos edificios se diseñaron para favorecer la refrigeracin pasiva (por ejemplo, con parasoles integrados) y los cerramientos controlados por el usuario.
El complejo albergará uno de los mayores proyectos europeos de emisiones bajas de carbono con el mayor sistema de cogeneración de electricidad, refrigeración y calefacción (CCHP) in situ de Londres, conectado a una serie de plantas más pequeñas para cubrir el suministro de los edificios residenciales de los alrededores. El edificio restaurado de la central eléctrica se convertirá en el edificio con cero emisiones de carbono más grande de Europa.
Dado el desarrollo gradual de un proyecto de esta magnitud, en el plan director se proporciona un conjunto de directrices de diseño que establecen diferentes grados de cumplimiento del diseño de acuerdo con los requisitos de las diferentes áreas del complejo, siendo las directrices más detalladas las relativas a la arquitectura y el entorno del edificio patrimonial. La alta densidad del proyecto asegura su viabilidad económica, justificó la ampliación de la red de transporte subterráneo de Londres y garantiza que el proyecto funcione como catalizador y punto de anclaje para la regeneración del barrio circundante
John Jay College of Criminal Justice
Este edificio, primer encargo de importancia para Rafael Viñoly en la ciudad de Nueva York, mantiene la fachada histórica original de estilo neobarroco flamenco de 1903, a lo que se añade un atrio con luz natural que distribuye la circulación desde su centro, además de una ampliación del edificio hacia el oeste acorde al contexto que hizo posible cumplir con la programación deseada por el cliente.
John Jay Criminal Justice College, uno de los campus de Manhattan dependientes del sistema de la City University de Nueva York, tiene su sede en el Haaren Hall, edificio de importancia histórica construido en 1903. El College necesitaba ampliar sus espacios académicos debido a un aumento del alumnado, pero se veía limitado por el deseo de preservar el exterior de estilo neobarroco flamenco del edificio original, declarado monumento histórico. Viñoly supo resolver las necesidades del cliente respetando las limitaciones del emplazamiento histórico con una ampliación que reconoce el diseño y las proporciones de la fachada, incluye un atrio central con luz natural cenital y construye hasta la envolvente permitida en la zona. El complejo programa del proyecto, que alberga una de las bibliotecas de justicia penal más grandes del mundo, además de aulas, oficinas del profesorado y la administración, un teatro, una piscina y un gimnasio, se ajustó a las limitaciones de la envolvente. Los espacios de mayor envergadura se ubicaron en la ampliación, mientras que los espacios “celulares”, como las oficinas y las aulas, se mantuvieron dentro del Haaren Hall.
La biblioteca de justicia penal es la pieza central del proyecto. La disposición de la colección alrededor del atrio central en dos niveles destaca la importancia de la biblioteca para la identidad del College. Al entrar en el edificio, los visitantes se encuentran literalmente inmersos en la biblioteca de justicia penal y pueden acceder directamente a todas las áreas del edificio desde este espacio con iluminación natural que reparte luz difusa por el resto del edificio.
La ampliación del sexto piso transforma el formato del tejado tipo mansarda del Haaren Hall en un diseño contemporáneo con un amplio espacio interior dedicado a las oficinas administrativas. La cubierta también se integró en el programa y alberga una pista de atletismo, canchas de tenis y un patio de juegos para la guardería infantil del College.
John Jay College incorporó principios de sostenibilidad en tanto que preservó y reutilizó un edificio de un siglo de antigüedad diseñado por C. B. J. Snyder. Dos tercios de las funciones del John Jay College se mantuvieron dentro de la existente construcción renovada, mientras que el tercio restante se aloja en la ampliación que complementa al edificio original.
John Jay College of Criminal Justice se diseó y se construyó en poco más de dos años. Fue el resultado de un proceso de construcción acelerado, con controles presupuestarios estrictos, que supuso una relación colaborativa entre el cliente, el equipo de diseño y los constructores. Este proyecto fue el primero en el que Viñoly implementó el proceso de construcción acelerado. Como resultado, se finalizó ajustándose al presupuesto, y el College recibió un incentivo de $5 millones por mudarse al nuevo edificio en el plazo estipulado.
Centro de Artes Visuales
Un audaz y luminoso edificio con forma de medialuna se eleva desde un innovador sistema de cimientos poco profundos que brinda protección a las ruinas romanas sobre las que se construyó y revitaliza a uno de los distritos más históricos de Colchester.
Como primera iniciativa para revitalizar la zona histórica de St. Botolph en Colchester, es el pilar de un plan de desarrollo a largo plazo de un distrito infrautilizado. El diseño de Viñoly para este nuevo centro de artes visuales amplía los parmetros originales del proyecto, que hubieran provocado la destrucción del carácter histórico de la calle St. Anne al introducir una escala institucional en la reducida escala del tejido urbano de un área comunitaria histórica. Después de trasladar el emplazamiento de la construcción hacia el este, al centro de la manzana, el museo con forma de medialuna se pudo ubicar dentro de un nuevo parque y se pudieron conservar y destacar los sitios del patrimonio local, incluidas las ruinas romanas. La audaz y luminosa forma del museo está pensada para invitar a los visitantes a participar en los programas del centro de arte.
Al norte, el edificio se curva en torno a un jardín victoriano del siglo XVIII. La cubierta ligeramente inclinada hacia arriba en consonancia con la topografía del emplazamiento culmina en un pórtico monumental que enmarca el vestbulo, cerrado por un muro de vidrio de suelo a techo. Al sur, el arco exterior de la medialuna está orientado a un pequeño jardín victoriano y a una intacta muralla romana que define los límites del emplazamiento. Contemporáneo en cuanto a forma y revestimiento (el exterior luce un distintivo revestimiento de paneles de aleación de cobre y aluminio), el edificio adopta la geometría axial del sitio y la altura aproximada de los edificios de los alrededores. La cimentación sobre losa de hormigón permite que la estructura se apoye sobre el suelo sin afectar a los restos arqueológicos enterrados y sin necesidad de que se realicen excavaciones profundas.
Otros elementos del programa son una tienda de regalos, un auditorio para proyecciones de películas y presentaciones, aulas e instalaciones educativas, oficinas administrativas y un restaurante con terraza al aire libre que proporciona más espacio para sentarse cuando las condiciones climáticas son buenas.
Realmente estos proyectos realizados por el Arq, Vignoly en otros países son muy buenos y mantienen contacto con el entorno.
No entiendo por qué acá en Punta del ESte no logra lo mismo.
Hay una diferencia entre lo que se presenta aquí y lo que se hace (o pretende hacer) acá. En esos países y ciudades se evalúan profesional y cuidadosamente estos proyectos. En el caso del San Rafael se armó un complejo basado exclusivamente en la plata y el pobre o inexistente criterio de desarrollo edilicio que existe en Maldonado y, en general, en el Uruguay. Llama la atención que, rechazado el proyecto original, apareciera enseguida otro, con maqueta incluida; ¿será que, ante la duda existía un plan A, otro B y, tal vez, un C, D… etc? Se ve que lo de la especulación financiera cala hondo y también se hacen jugadas de este tipo para ver hasta donde es posible llegar.
Totalmente de acuerdo con Ma. Luisa Cordone
En los ejemplos el proyecto respeta el «genius loci» del lugar. Lo que se pretende hacer en Punta del Este, no
Realmente estos proyectos realizados por el Arq, Vignoly en otros países son muy buenos y mantienen contacto con el entorno.
No entiendo por qué acá en Punta del ESte no logra lo mismo.
Hay una diferencia entre lo que se presenta aquí y lo que se hace (o pretende hacer) acá. En esos países y ciudades se evalúan profesional y cuidadosamente estos proyectos. En el caso del San Rafael se armó un complejo basado exclusivamente en la plata y el pobre o inexistente criterio de desarrollo edilicio que existe en Maldonado y, en general, en el Uruguay. Llama la atención que, rechazado el proyecto original, apareciera enseguida otro, con maqueta incluida; ¿será que, ante la duda existía un plan A, otro B y, tal vez, un C, D… etc? Se ve que lo de la especulación financiera cala hondo y también se hacen jugadas de este tipo para ver hasta donde es posible llegar.
que se vaya con su musica a otra parte !!!! Y que se LLAME a concurso, como tendria que haberse hecho !!!